meditaciones
IGLESIA Y FAMILIA
|
|
PREGUNTAS REFERENTES AL NOVIAZGO REGUNTAS REFERENTES AL NOVIAZGO
Sin duda que en las discusiones acerca del noviazgo cristiano, hay ciertas preguntas en la mente de papás, mamás y jóvenes cristianos de hoy. Estas preguntas caen en dos grupos principales: 1) Preguntas sobre el noviazgo y 2) preguntas durante el noviazgo. Preguntas sobre el noviazgo Preguntas sobre el noviazgo Típicamente, las preguntas sobre el noviazgo son acerca de las excepciones al modelo general del noviazgo que se encuentra en las Escrituras, con demasiada frecuencia las excepciones ocurren por nuestra condición y cultura caída y pecaminosa. Entonces, ¿cuáles son algunos de los obstáculos que copan nuestra vista cuando nuestro propósito es enfocar el noviazgo? PREGUNTA 1: ¿Qué si un no cristiano pide permiso para cortejar a un cristiano? La Biblia nos dice que el creyente debe contraer matrimonio sólo con otro creyente. Primera Corintios 7 da por sentado en todo el capítulo que los cristianos sólo deben casarse con otros cristianos, especialmente los versículos 12-16, que consideran a los matrimonios “mixtos” particularmente problemáticos. Pero el mandato se declara con máxima claridad en el versículo 39 que uno “libre es de casarse con quien quiera con tal que sea en el Señor”. Uno no tiene que mirar más allá del versículo 22 del mismo capítulo para encontrar que la frase “en el Señor” significa ser cristiano. “El que fue llamado siendo libre, esclavo es del Señor”. Ahora bien, la referencia cruzada de 1 Corintios 7 es 2 Corintios 6:14-16: “No os unáis en yugo desigual con los incrédulos”. La frase “yugo desigual” trae a mente Deuteronomio 22:10 donde habla de no uncir un buey con un asno para arar. Cualquier agricultor te puede decir que estos animales no tiran bien juntos; cada uno quiere ir en una dirección distinta, lo cual hace casi imposible arar un surco derecho. Esta es precisamente la imagen que presenta 2 Corintios 6. Ningún creyente debe formar una “pareja dispareja” con un no creyente porque irán en distintas direcciones, siéndoles imposible seguir la senda derecha y angosta de Cristo. El pasaje luego ofrece cuatro vívidos contrastes como ilustraciones. Unirse el creyente con un no creyente es como unir la justicia con la injusticia, la luz con la oscuridad, Cristo con Satanás y al templo de Dios con ídolos.
0 Comentarios
El padre de familia nunca debe ni siquiera considerar la posibilidad de un noviazgo hasta estar convencido de que su hijo o hija ha logrado las metas en la etapa de la amistad en preparación para el matrimonio. Esto incluye el desarrollo de una devoción desinteresada a Cristo, confianza en la protección y provisión de su padre, fidelidad física y espiritual a su futuro cónyuge, preparación espiritual y vocacional para su vida adulta y confianza en el gobierno sabio, cariñoso y soberano de Dios. De otra manera, tanto trabajo sin terminar hará que el matrimonio futuro sea inadecuado y bíblicamente inapropiado. Dirección sabia para el noviazgo Dirección sabia para el noviazgo ¿Qué debe desear en un cónyuge el cristiano con una mentalidad espiritual? Dos aspectos esenciales: Manejar eficazmente el dilema de las salidas en pareja es sólo la mitad de la cuestión, el “despojaos” de Efesios 4:22-24. La otra mitad: “vestíos”, incluye comprender los conceptos y el sentido práctico del noviazgo cristiano. La preparación para el noviazgo comienza con una compresión exacta de lo que es. Hasta el siglo XX, los niños sabían lo que era el noviazgo porque se formaban en hogares e iglesias que lo practicaban. Pero hoy, lamentablemente, es un enigma que requiere una explicación. El significado del noviazgo Al igual que la palabra trinidad, la palabra noviazgo no se encuentra en la Biblia, pero sí la idea. Los diccionarios modernos nos dan definiciones como la siguiente: “Condición de novio o novia”, y define “novio” o “novia” como persona “que está próxima a casarse” y “la que mantiene relaciones amorosas en expectativa de futuro matrimonio” Pero el noviazgo cristiano es el proceso de ir conociendo a una persona con pureza y con miras al matrimonio. Es el tiempo, después que el pretendiente ha completado su preparación espiritual y vocacional para el matrimonio, de evaluar su carácter espiritual, sus valores, intereses, creencias, prácticas y el propósito de su vida para ser un cónyuge piadoso. Implica límites o el modo correcto para evaluar las evidencias del verdadero carácter de una persona. En la actualidad, los hijos no tienen prácticamente nada de conocimiento o comprensión del noviazgo bíblico. En el pasado, chicos y chicas practicaban un romance piadoso en su hogar, iglesia y comunidad. Era la experiencia que tenían en común sus hermanos, hermanas, primos, amigos y vecinos. Lo aprendían prácticamente por osmosis. Pero todo eso ha cambiado. Ahora, para vencer la fuerte seducción de las salidas mundanas en pareja, los jóvenes necesitan una capacitación intencional y concienzuda para el noviazgo. Supongamos que un hombre pudiese ir al cielo sin santidad...
SUPONGAMOS por un momento que se le permitiera entrar al cielo sin santidad. ¿Qué haría? ¿De qué podría disfrutar allí? ¿A cuáles de todos los santos se acercaría y al lado de quién se sentaría? Sus placeres no son los placeres de usted, ni sus gustos los gustos de usted, ni su carácter el carácter de usted. ¿Cómo podría ser feliz, si no fue santo en la tierra? Quizás prefiere ahora la compañía de los superficiales y los indiferentes, los mundanos y los avaros, los parranderos y los que van tras los placeres, los impíos y los profanos. No habrá ninguno de ellos en el cielo. Quizás cree ahora que los santos de Dios son demasiado estrictos, exigentes y serios. Prefiere evitarlos. No disfruta de su compañía. No habrá ninguna otra compañía en el cielo. Quizás piense ahora que orar, leer la Biblia y cantar himnos es aburrido, triste y tonto, algo para ser tolerado de vez en cuando, pero no disfrutado. Considera al Día del Señor como una carga y cosa pesada; no podría pasar más que una porción pequeña del día adorando a Dios. Pero recuerde, el cielo es un Día del Señor sin fin. Los que allí viven no descansan de decir día y noche: “Santo, santo, santo, Señor Omnipotente” y de cantar alabanzas al Cordero. ¿Cómo podría, alguien que no es santo disfrutar de ocupaciones como éstas? ¿Cree usted que a alguien así le encantaría conocer a David, a Pablo y a Juan después de haber pasado toda una vida haciendo las cosas de las cuales ellos hablaban en contra? ¿Disfrutaría de dulces conversaciones con ellos, comprobando que tiene con ellos mucho en común? |
Archivos
Diciembre 2020
Categorías
Todo
|